Restauración

Gracia y Paz

Desde hace mucho tiempo y a través de mucha gente el Señor nos promete grandes cosas. Desde hace mucho el Señor quiere simplemente obediencia. Pero no la del sometimiento inquisitorio, el Señor quiere que le obedezcamos en amor. Y qué sucede cuando le obedecemos? Por medio del profeta Jeremías nos dice: "Clama a mí y te responderé, y te daré a conocer cosas grandes y ocultas que tú no sabes. Les daré salud y los curaré; los sanaré y haré que disfruten de abundante paz y seguridad. Los purificaré de todas las iniquidades que cometieron contra mí; les perdonaré todos los pecados con que se rebelaron contra mí. Den gracias al Señor Todopoderoso, porque el Señor es bueno, porque su amor es eterno". Jeremías 33, 1-11. Bendiciones.