Gracia y Paz.
Advertidos estamos de todo lo que debemos enfrentar en este mundo. Si se dan cuenta cada día nos toca lidiar con personas llenas de egoísmo y avaricia, jactanciosos, arrogantes, desobedientes a los padres, ingratos, impíos, insensibles, implacables, calumniadores, libertinos, despiadados, enemigos de todo lo bueno, traicioneros, impetuosos, vanidosos y más amigos del placer que de Dios. En resumen, el diablo en sus diferentes manifestaciones encarnado en los seres humanos. La palabra nos ordena apartarnos inmediatamente. Ahora bien, ustedes preguntarán, ¿Qué sucede cuando por diferentes razones estamos obligados a compartir parte de nuestro diario vivir con personas así? Gloria a Dios su Sagrada Escritura es Toda inspirada en El y útil para enseñar! Ante esta situación Pablo nos instruye a seguir paso a paso las enseñanzas que hemos adquirido por medio de la Palabra, ser ejemplos con nuestra manera de vivir, dar a conocer nuestros propósitos, nuestra fe, paciencia, amor, nuestra constancia. Nada de desanimarnos pues somos los ungidos del Señor y su Espíritu Santo que mora en nosotros resplandece, sobresale y predomina ante toda situación. Bendiciones. Meditado de 2 Timoteo 3
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